Análisis: Final Fantasy Tactics: The War of the Lions
Juego: Final Fantasy Tactics: The War of the Lions.
Género: RPG Táctico.
Plataforma: PSP.
Hace ya más de 10 años que Final Fantasy Tactics salió a la venta en tierras niponas. 10 años durante los cuales este juego se convirtió en el favorito de muchos, ayudando a la primera PlayStation a convertirse en una de las dos consolas con mejor catálogo de la historia (junto a su descendiente, obviamente).
Tras esta larguísima espera, los usuarios europeos por fin podemos disfrutar de este gran juego de Square, que nunca vio la luz aquí en su versión de PlayStation 1.
La Guerra de los Leones
Tras la Guerra de los Cincuenta Años, Ivalice ha quedado dividida en dos.
El Rey Omdolia ha sido víctima de la Plaga Negra, por lo que su joven hijo, el Príncipe Orinas, debe asumir la responsabilidad como nuevo Rey. Sin embargo, debido a su corta edad (pues tan solo tiene 2 años), el joven Príncipe necesita de un regente que asuma las funciones de Rey hasta que él tenga la edad suficiente como para reinar.
El principal candidato es el duque Larg, hermano de la Reina Ruvelia. Sin embargo, el Consejo decide nombrar como regente al primo más joven del Rey, el duque Goltanna.
Estos hechos son los que desencadenan la conocida como Guerra de los Leones, una guerra civil entre el duque Larg, también conocido como el León Blanco, apoyado por los caballeros libres y los miembros de la nobleza caídos en desgracia tras la Guerra de los Cincuenta Años, y el duque Goltanna o León Negro, aliado con la mayor parte de la aristocracia.
Final Fantasy Tactics nos cuenta la historia desde el punto de vista de Ramza Beoulve, un joven perteneciente a una de las familias más importantes de Ivalice.
Ramza se verá involucrado en esta guerra tras el secuestro de la Princesa Ovelia, y aquí será cuando comience nuestra aventura.
Ramza contará con la ayuda de multitud de personajes, ya sea contratados o conseguidos a medida que avanza el juego. Con ayuda de este “pequeño” ejército deberemos salvar a la Princesa y acabar con la guerra.
Aunque pueda parecer muy simple a priori, Final Fantasy Tactics posee un gran número de añadidos a la historia (que obviamente no os contaré), los cuales han convertido este título en uno de los más alabados por gran parte de los videojugadores.
¿Y es para tanto? Pues no. La historia de Final Fantasy Tactics no solo es previsible, sino que además no aporta nada nuevo. Básicamente deberemos ir con Ramza “el salvador”, única persona en Ivalice que sabe lo que es correcto, y eliminar a nuestros rivales, osease, “la gente ansiosa de poder que estarán cegados por conseguir su objetivo y solo querrán ver correr sangre”. Los que en un principio vemos como enemigos acabarán muriendo bajo nuestra espada, y los que parecen amigos también. La cuestión es matar.
Ojo, que no digo que la historia sea mala, solo digo que lo único en que se han estrujado el cerebro es en buscar tan ingente cantidad de nombres. Pero bueno, el resto tendréis que descubrirlo vosotros mientras jugáis.
Lo realmente importante: los combates
La historia básicamente se encargará de darle algún sentido a tanto combate. Y lo hace muy bien. Tendremos multitud de enfrentamientos contra gente (y no gente) de todo tipo, y la mayoría tendrá algo que ver con la historia. Es decir, que no tendremos que enfrentarnos a un boss porque sí, solo porque estemos en una mazmorra, como ocurre en ¿casi? todos los juegos de rol, sino que siempre habrá una razón relacionada con el argumento.
Los combates se desarrollan en escenarios cuadriculados que se adaptan al paisaje, con casillas de igual tamaño pero, en ocasiones, de distinta altitud. Es decir, que podremos subir escaleras, ocultarnos tras muros, escalar casas, etc.
Cada bando (normalmente dos) estará formado por varios personajes, cada uno de los cuales ocupará una casilla. Al igual que los juegos de rol por turnos, cada personaje tendrá una barra de espera, y, cuando esta barra esté completa, será su turno.
Lo que distingue a los juegos tácticos de los de rol por turnos es que durante el turno de un personaje no nos limitaremos a darle una orden, sino que podremos desplazarnos por las casillas para poder atacar al enemigo, acercarnos a un aliado para curarle, etc. Es decir, como si fuera un juego de estrategia (que de hecho también lo es).
Si cumplimos el objetivo determinado antes de empezar el combate, habremos conseguido la victoria. Estos objetivos pueden ser “eliminar a todos los enemigos”, “evitar que muera alguien”, “acabar con una persona en concreto”…
Nuestras tropas, ¿cantidad o calidad?
Será fundamental para ganar los combates contar con varios personajes entre nuestras filas. Cada personaje estará equipado por armas, cascos, armaduras, accesorios… y tendrá un job (trabajo) asociado. Cada job da acceso a unas determinadas habilidades que otros no poseen, permitiendo así usar armaduras pesadas (Knight), lanzas (Dragoon), magia de ataque (Black Mage), magia curativa (White Mage), y un larguísimo etcétera.
Al principio solo tendremos acceso a dos jobs básicos (Squire y Chemist), pero a medida que vayamos subiendo estos jobs de nivel podremos acceder a más de 20 jobs distintos. Además de los ya mencionados, nos encontraremos con Archer, Thief, Monk, Time Mage, Summoner, Orator, Mystic, Geomancer, Ninja, Samurai... y así hasta completar la larga lista de jobs que nos ofrece este juego.
Esto sin contar los personajes que se nos unan durante nuestra aventura, los cuales contarán con jobs individuales que solo ellos podrán tener (Por ejemplo: Machinist, Holy Knight, Game Hunter…). Sumando todos los jobs, podremos disfrutar de más de 40 trabajos distintos.
Cada personaje podrá cambiar de job en el momento que quiera (excepto en los combates), pudiendo así conseguir habilidades de varios jobs distintos.
Aunque al principio estemos tentados a tener un personaje por cada job, a medida que avance el juego descubriremos que los personajes reclutados van perdiendo su valor hasta quedar totalmente eclipsados por el poder de los personajes que se nos unen. Puede que queramos conservar a los reclutados para las misiones secundarias, pero, salvo pequeñas excepciones, estos personajes quedarán totalmente obsoletos.
Apartado técnico
Poco o nada ha cambiado en Final Fantasy Tactics la música y el apartado gráfico con este remake. Si acaso destacar como novedad las inexplicables ralentizaciones de las que somos testigos al ejecutar determinadas habilidades.
La música es agradable de escuchar, aunque quizá demasiado repetitiva… No está a la altura de Nobuo Uematsu, obviamente, pero para el tipo de juego que es no podemos pedir más.
Los gráficos cumplen sin problemas, combinando las 2D de los personajes con las 3D del escenario. Sin embargo, alguna vez los elementos del escenario incordiarán más de lo debido (esos árboles en el centro del mapa…), pero nada especialmente molesto.
Mención aparte merecen los nuevos vídeos. En otro juego seguramente no encajarían, pero en Final Fantasy Tactics quedan como anillo al dedo. Enlazan perfectamente los distintos momentos de la aventura, además de otorgar voz a nuestros protagonistas.
Voces que, eso sí, están en inglés… Y es que el juego entero está en inglés. Pero no un inglés normal, no, sino inglés antiguo. Si fuera inglés normal aún sería medianamente sencillo seguir la trama del juego para los que sepan algo de este idioma, pero así se complica bastante.
Sin duda este es el aspecto más deplorable del juego. ¿No han sido capaces de molestarse en traducir un juego a nuestro idioma en 10 años?
Pero bueno, qué podemos esperar de Square Enix, que no ha sido capaz de traernos traducido ni el Final Fantasy 1…
Duración y dificultad, luz y oscuridad
Completar el juego nos puede llevar más de 40 horas, y si queréis descubrir todos los secretos e historias paralelas nos podemos ir fácilmente a las 60-70 horas. Merece la pena, sobre todo para conseguir a los personajes secretos (como Cloud, de Final Fantasy VII).
Sobre la dificultad de FFT habría para escribir un libro. Es el único juego que conozco con este cambio de dificultad de un momento a otro: Empieza bien, siendo un juego que requiere algo de habilidad para salir victorioso de los combates. De vez en cuando nos encontramos combates algo más difíciles, como algunos boss, que pueden llegar a desesperarnos (sobre todo cuando hay que aguantar una conversación antes de la lucha para luego caer derrotado en menos de un minuto…). Pero bueno, esto no debería ser ningún problema. Desde luego es mucho más satisfactorio derrotar a enemigos tan duros, aunque te haga desengancharte momentáneamente de la historia.
Lo gracioso viene ahora. Y es que, llegado un momento de la aventura, tras haber sufrido tanto para avanzar, se nos unirá un personaje que hará los combates más fáciles que pasarse el vídeo introductorio. Como detalle curioso os diré que el jefe final del juego solo pudo hacerme un ataque antes de caer derrotado por mi equipo (que no iban a un nivel muy avanzado).
Conclusiones
Por fin un juego de rol para PSP con una historia interesante, aunque sin ser nada especial, y una jugabilidad que nos hará estar enganchados más de 60 horas delante de nuestra PSP.
Como además tengamos algún poseedor de PSP cerca, podemos realizar misiones conjuntas o enfrentarnos entre nosotros, lo que hará que esa (ya de por sí impactante) cifra de 60 horas se quede en nada.
Los que tengáis más maestría con el inglés seguramente disfrutéis más que nadie de Final Fantasy Tactics. Al resto… siempre os quedará los combates, que no hay nada que entender.
Nota de Legend SK: 8
Género: RPG Táctico.
Plataforma: PSP.
Hace ya más de 10 años que Final Fantasy Tactics salió a la venta en tierras niponas. 10 años durante los cuales este juego se convirtió en el favorito de muchos, ayudando a la primera PlayStation a convertirse en una de las dos consolas con mejor catálogo de la historia (junto a su descendiente, obviamente).
Tras esta larguísima espera, los usuarios europeos por fin podemos disfrutar de este gran juego de Square, que nunca vio la luz aquí en su versión de PlayStation 1.
La Guerra de los Leones
Tras la Guerra de los Cincuenta Años, Ivalice ha quedado dividida en dos.
El Rey Omdolia ha sido víctima de la Plaga Negra, por lo que su joven hijo, el Príncipe Orinas, debe asumir la responsabilidad como nuevo Rey. Sin embargo, debido a su corta edad (pues tan solo tiene 2 años), el joven Príncipe necesita de un regente que asuma las funciones de Rey hasta que él tenga la edad suficiente como para reinar.
El principal candidato es el duque Larg, hermano de la Reina Ruvelia. Sin embargo, el Consejo decide nombrar como regente al primo más joven del Rey, el duque Goltanna.
Estos hechos son los que desencadenan la conocida como Guerra de los Leones, una guerra civil entre el duque Larg, también conocido como el León Blanco, apoyado por los caballeros libres y los miembros de la nobleza caídos en desgracia tras la Guerra de los Cincuenta Años, y el duque Goltanna o León Negro, aliado con la mayor parte de la aristocracia.
Final Fantasy Tactics nos cuenta la historia desde el punto de vista de Ramza Beoulve, un joven perteneciente a una de las familias más importantes de Ivalice.
Ramza se verá involucrado en esta guerra tras el secuestro de la Princesa Ovelia, y aquí será cuando comience nuestra aventura.
Ramza contará con la ayuda de multitud de personajes, ya sea contratados o conseguidos a medida que avanza el juego. Con ayuda de este “pequeño” ejército deberemos salvar a la Princesa y acabar con la guerra.
Aunque pueda parecer muy simple a priori, Final Fantasy Tactics posee un gran número de añadidos a la historia (que obviamente no os contaré), los cuales han convertido este título en uno de los más alabados por gran parte de los videojugadores.
¿Y es para tanto? Pues no. La historia de Final Fantasy Tactics no solo es previsible, sino que además no aporta nada nuevo. Básicamente deberemos ir con Ramza “el salvador”, única persona en Ivalice que sabe lo que es correcto, y eliminar a nuestros rivales, osease, “la gente ansiosa de poder que estarán cegados por conseguir su objetivo y solo querrán ver correr sangre”. Los que en un principio vemos como enemigos acabarán muriendo bajo nuestra espada, y los que parecen amigos también. La cuestión es matar.
Ojo, que no digo que la historia sea mala, solo digo que lo único en que se han estrujado el cerebro es en buscar tan ingente cantidad de nombres. Pero bueno, el resto tendréis que descubrirlo vosotros mientras jugáis.
Lo realmente importante: los combates
La historia básicamente se encargará de darle algún sentido a tanto combate. Y lo hace muy bien. Tendremos multitud de enfrentamientos contra gente (y no gente) de todo tipo, y la mayoría tendrá algo que ver con la historia. Es decir, que no tendremos que enfrentarnos a un boss porque sí, solo porque estemos en una mazmorra, como ocurre en ¿casi? todos los juegos de rol, sino que siempre habrá una razón relacionada con el argumento.
Los combates se desarrollan en escenarios cuadriculados que se adaptan al paisaje, con casillas de igual tamaño pero, en ocasiones, de distinta altitud. Es decir, que podremos subir escaleras, ocultarnos tras muros, escalar casas, etc.
Cada bando (normalmente dos) estará formado por varios personajes, cada uno de los cuales ocupará una casilla. Al igual que los juegos de rol por turnos, cada personaje tendrá una barra de espera, y, cuando esta barra esté completa, será su turno.
Lo que distingue a los juegos tácticos de los de rol por turnos es que durante el turno de un personaje no nos limitaremos a darle una orden, sino que podremos desplazarnos por las casillas para poder atacar al enemigo, acercarnos a un aliado para curarle, etc. Es decir, como si fuera un juego de estrategia (que de hecho también lo es).
Si cumplimos el objetivo determinado antes de empezar el combate, habremos conseguido la victoria. Estos objetivos pueden ser “eliminar a todos los enemigos”, “evitar que muera alguien”, “acabar con una persona en concreto”…
Nuestras tropas, ¿cantidad o calidad?
Será fundamental para ganar los combates contar con varios personajes entre nuestras filas. Cada personaje estará equipado por armas, cascos, armaduras, accesorios… y tendrá un job (trabajo) asociado. Cada job da acceso a unas determinadas habilidades que otros no poseen, permitiendo así usar armaduras pesadas (Knight), lanzas (Dragoon), magia de ataque (Black Mage), magia curativa (White Mage), y un larguísimo etcétera.
Al principio solo tendremos acceso a dos jobs básicos (Squire y Chemist), pero a medida que vayamos subiendo estos jobs de nivel podremos acceder a más de 20 jobs distintos. Además de los ya mencionados, nos encontraremos con Archer, Thief, Monk, Time Mage, Summoner, Orator, Mystic, Geomancer, Ninja, Samurai... y así hasta completar la larga lista de jobs que nos ofrece este juego.
Esto sin contar los personajes que se nos unan durante nuestra aventura, los cuales contarán con jobs individuales que solo ellos podrán tener (Por ejemplo: Machinist, Holy Knight, Game Hunter…). Sumando todos los jobs, podremos disfrutar de más de 40 trabajos distintos.
Cada personaje podrá cambiar de job en el momento que quiera (excepto en los combates), pudiendo así conseguir habilidades de varios jobs distintos.
Aunque al principio estemos tentados a tener un personaje por cada job, a medida que avance el juego descubriremos que los personajes reclutados van perdiendo su valor hasta quedar totalmente eclipsados por el poder de los personajes que se nos unen. Puede que queramos conservar a los reclutados para las misiones secundarias, pero, salvo pequeñas excepciones, estos personajes quedarán totalmente obsoletos.
Apartado técnico
Poco o nada ha cambiado en Final Fantasy Tactics la música y el apartado gráfico con este remake. Si acaso destacar como novedad las inexplicables ralentizaciones de las que somos testigos al ejecutar determinadas habilidades.
La música es agradable de escuchar, aunque quizá demasiado repetitiva… No está a la altura de Nobuo Uematsu, obviamente, pero para el tipo de juego que es no podemos pedir más.
Los gráficos cumplen sin problemas, combinando las 2D de los personajes con las 3D del escenario. Sin embargo, alguna vez los elementos del escenario incordiarán más de lo debido (esos árboles en el centro del mapa…), pero nada especialmente molesto.
Mención aparte merecen los nuevos vídeos. En otro juego seguramente no encajarían, pero en Final Fantasy Tactics quedan como anillo al dedo. Enlazan perfectamente los distintos momentos de la aventura, además de otorgar voz a nuestros protagonistas.
Voces que, eso sí, están en inglés… Y es que el juego entero está en inglés. Pero no un inglés normal, no, sino inglés antiguo. Si fuera inglés normal aún sería medianamente sencillo seguir la trama del juego para los que sepan algo de este idioma, pero así se complica bastante.
Sin duda este es el aspecto más deplorable del juego. ¿No han sido capaces de molestarse en traducir un juego a nuestro idioma en 10 años?
Pero bueno, qué podemos esperar de Square Enix, que no ha sido capaz de traernos traducido ni el Final Fantasy 1…
Duración y dificultad, luz y oscuridad
Completar el juego nos puede llevar más de 40 horas, y si queréis descubrir todos los secretos e historias paralelas nos podemos ir fácilmente a las 60-70 horas. Merece la pena, sobre todo para conseguir a los personajes secretos (como Cloud, de Final Fantasy VII).
Sobre la dificultad de FFT habría para escribir un libro. Es el único juego que conozco con este cambio de dificultad de un momento a otro: Empieza bien, siendo un juego que requiere algo de habilidad para salir victorioso de los combates. De vez en cuando nos encontramos combates algo más difíciles, como algunos boss, que pueden llegar a desesperarnos (sobre todo cuando hay que aguantar una conversación antes de la lucha para luego caer derrotado en menos de un minuto…). Pero bueno, esto no debería ser ningún problema. Desde luego es mucho más satisfactorio derrotar a enemigos tan duros, aunque te haga desengancharte momentáneamente de la historia.
Lo gracioso viene ahora. Y es que, llegado un momento de la aventura, tras haber sufrido tanto para avanzar, se nos unirá un personaje que hará los combates más fáciles que pasarse el vídeo introductorio. Como detalle curioso os diré que el jefe final del juego solo pudo hacerme un ataque antes de caer derrotado por mi equipo (que no iban a un nivel muy avanzado).
Conclusiones
Por fin un juego de rol para PSP con una historia interesante, aunque sin ser nada especial, y una jugabilidad que nos hará estar enganchados más de 60 horas delante de nuestra PSP.
Como además tengamos algún poseedor de PSP cerca, podemos realizar misiones conjuntas o enfrentarnos entre nosotros, lo que hará que esa (ya de por sí impactante) cifra de 60 horas se quede en nada.
Los que tengáis más maestría con el inglés seguramente disfrutéis más que nadie de Final Fantasy Tactics. Al resto… siempre os quedará los combates, que no hay nada que entender.
Nota de Legend SK: 8
Etiquetas: Final Fantasy Tactics, PSP
12 comentarios:
Supongo que estar en inglés antiguo, que la música sea repetitiva, y el que algunos escenarios sean un pokito molestos, le quita esos dos puntitos que le faltan para el diez no? además de la historia previsible XD
Me quedo con Príncipe Orinas XDD imaginación poniendo nombres? xD Menos mal que está en inglés si no.. XD
De Noire, A las 29 de febrero de 2008, 12:55
Ya había oído hablar de las ralentizaciones. Flipa que un remake de un juego de PS1 tenga ralentizaciones. Los de Square van de mal en peor.
De Anónimo, A las 29 de febrero de 2008, 13:54
Por las horas que te has tirado jugando, bueno debe de ser xDD
De Jaitor, A las 29 de febrero de 2008, 23:43
y que personaje se supone que es tan desequilibrante y es casi ya un paseo el juego? Cloud?
De Anónimo, A las 1 de marzo de 2008, 16:53
Hombre pues no lo digo porque es spoiler. Es un personaje de la historia, no opcional
De Christian, A las 1 de marzo de 2008, 19:18
jajaja... se nota que no lo han jugado... es un excelente juego para las personas que gustan del pensar en un rpg y no matar para avanzar... ahora que se pueden hacer partidas de dos equipos es aun mejor... sin duda es el mejor rpg que he jugado
De Anónimo, A las 2 de abril de 2008, 19:12
WTF? Se nota que no lo han jugado dice XDD Espero que eso no lo digas por el que ha hecho el análisis, porque me apuesto lo que sea a que Shock ha jugado más horas a FFT que tú.
De Anónimo, A las 2 de abril de 2008, 19:32
Lo que se nota es que no has leído el análisis porque hablo hasta del jefe final xD Y sí, es problable que haya jugado más que tú.
De Christian, A las 2 de abril de 2008, 20:45
Pues ese personaje ni siquiera está a mitad de la historia. Imagino que te referirás al "Príncipe" Agrias ( que no es ni príncipe ni siquiera es un hombre pero es la pinta que tiene).
Con el príncipe Agrias casi todo es coser y cantar, es mucho mejor que el protagonista y solo se ve superado por el viejo que te dan al final ( no cuento a los personajes especiales como el dragón o el robot por que no son de la historia principal)
De Anónimo, A las 1 de octubre de 2008, 19:20
No, me refiero a ese otro del que hablas, pero no digas nada más que no quiero spoilear a la gente
De Christian, A las 1 de octubre de 2008, 21:51
yo stoy jugando al d psp,y m he pasado el juego.una cosa q m raya es q para q se guarda tras el final?en ninguna partida anterior m pasa nada raro,y en nueva partida empiezo d cero.para q cojones se guarda al final?
De Anónimo, A las 28 de enero de 2010, 14:35
Prueba a cargar esa partida a ver si empiezas desde el principio pero con los personajes e items que tenías al acabar (al menos los que no afecten a la historia)
De Christian, A las 28 de enero de 2010, 16:49
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